miércoles, 24 de diciembre de 2008

Compañero Jesús ¿presente?

Creo en Jesús todo astuto, creador de la sabiduría y la valentía... Hay Jesús, compadre, no entiendo porque en su calidad de humano lo tildan de profeta. Pobre Jesús, que en su calidad de héroe divino no tiene derecho a defenderse de las garras de una iglesia farandulera que le sube el estatus. Seguramente si estuvieras entre nosotros SQP hubiese investigado tu calidad terrenal y tu actividad sexual con miles de Marías Magdalenas. Oh Jesús, el profeta de la farándula, creo que te admiro, no lo creo, lo siento, eres una figura digna de admiración, llevan más de 2000 años cuestionando tu existencia y ahí sigues, inmóvil, quizás riéndote de nuestra estupidez, porque no cuestionaremos a tu padre, un tal señor (de la casi querencia) que no ha hecho presencia en esta tierra, pero tú, mi Jesús, estuviste entre nosotros, con nosotros, hay registros de ellos (dicen), y mientras todos especulan tu verdadera razón de ser, te mantienes firme. Te cuestionan el física (ya que dudosamente tienes pinta de modelo neo-hippie estadounidense y no de un simple profeta con rasgos de su territorio natal) Tus amoríos con quizás cuantas chiquillas locas, tu capacidad de milagro, etc., etc. Farandulizan tu existencia, tu actuar, tu ser una y mil veces y tu sigues, ahí, sin defenderte. ¿Por qué? Porque nos dejas con esta duda compañero, porqué no vienes y nos aclaras esta incertidumbre… ¿Sabes porque? Porque tu sabiduría trasciende, va más allá. Porque fuiste valiente, tu deceso fue valientemente en una cruz, moriste por tus ideales, te tacharon de loco y seguiste ahí, fuerte. Quizás no eras santo, quizás si te masturbabas, desnudabas a magdalena con la mirada, quizás no multiplicaste el vino, ni hiciste ver a ciego y tal vez toda esa manga de idealizadores que escribieron en la tan conocida revista de farándula “Biblia” olvidaron que existía la objetividad. Ellos que no vieron más allá. Creo en ti Jesús, pero en ti como compañero, como un loco que lucho por lo que creyó, quizás cuantos Jesús más han muerto en la cruz de sus ideales, han sido tachados de locos y lamentablemente su padre no era un Dios que capaz de hacer justicia. Cuantos, cuantos Jesús andarán deambulando. Me saco el sombrero ante ti, querido Jesús por la valentía de soportar cuanto pelambre en torno a tu honrada persona, creer en lo ideales, ser humano frente a un montón de pelafustanes ignorantes que prefirieron atribuir tus grandes características a un loco o a un Dios, liberándose así de la culpa de saber que ellos también podrían serlo, pero es mas fácil ser un cerdo hipócrita, un cristiano miserable, un ser humano simplemente. Me pongo de pie frente a ti, y a todos los Jesús que han pasado por esta tierra, a todos los que han muerto por lo que creyeron, sintieron, creo en ti Jesús, pero lejos de tu calidad de ser divino, creo en ti como hombre revolucionario, no me importan tus milagros, no me importa tu religión, ni tu tendencia política (bueno, en realidad si). Me importa que hayas pasado por esta tierra, que seas tan querido, tan odiado, tan burlado por aquellos niñitos ateos que juegan a ser rebeldes, tan idolatrado frente a esos cerdos creyentes que flagelan al pueblo. Me importa que a pesar de todo, sigas siendo uno de los mayores misterios y que tú, con tu leve sonrisa irónica plasmada en cada imagen, nos hagas un guiño a quienes creemos en ti y en tu amor por el vino. Salud Compañero.