domingo, 24 de mayo de 2009

El sueño del monólogo.

Yo quería patearle el culo al hombre de cara estirada, tal como sus billletes, billetes de mierda. Que no los suelta, no los suelta. Y él se ríe. Y nos reimos en el reflejo de nuestros miedos. Yo no entiendo. Y sigue rezando, y sigue donando esa migajas de pesos, llenos de mierda, llenos de asco y juegos turbios. Juegos sucios. Me repugna esta situación. Viejo de mierda, pienso sin cesar. Y su cara estirada, los billetes estirados, el olor a masturbación capitalista. Así, y yo le pongo como quiero. Y él hace lo que quiere. Y son todos unos cerdos. Y pienso en tantas palabras. Mierda, mierda, mierda. Quiero vomitar y me tiritan las piernas. Y pienso que todo es una mentira. Pienso que Dios es el mejor negocio. Que la enfermades son sus mejores negocios. Que el sudor de mis papás es su mejor negocio. Que las carencias pegadas en el rostro de cada uno de nosotros es su mejor negocio. Y me enerva la situación. Todo es negocio, lo decía un libro. Todo tiene su precio. Lo decían sus ojos. El precio, el precio, precio.....
-Ya pues, señorita, despierte...¿Cuál es el precio de éste? - Dijo, indignado.
- Cincuenta mil, setencientos treinta- Dije, con exceso de lentitud. Desconcertada. Otra vez, sin entender.

domingo, 3 de mayo de 2009

Cuando Nada.

Eran muchas las frases que intentaba hilar mientras apreciaba un nublado atardecer desde el decimo tercer piso. Un día fuerte, si es acaso este adjetivo alcanza. Tengo ganas de escribir, sin metáforas, ser lo más literal posible, decir todo, con nombre y apellido, con pies y cabeza. Nada de incoherencias, para que mis manos sean capaces de hundirse en cada ojo que esté que en este preciso instante esté uniendo mis letras (deformadas e inciertas). Hoy, mientras todo se reducía a una mínima imagen de mis ojos disueltos en sensacionas extrañas, pensaba... pensaba tanto, demasiado. Quería fumar, quería secar esas lágrimas, quería soltar una sonrisa. Una linda tristeza adornaba el frío atardecer. Plasmar la historia en distintos trozos de realidades, comparar. Observarme, detenerme y sentirme. Así, sola, tranquila y conciente. Sí; demasiado conciente. Es extraño sentirme así, como me sentí hoy en el piso trece. Fue extraño cuando caminamos fumando un cigarro y me di el tiempo de observar todo lo que veían mis incredulos ojos. Todo fue extraño hoy. La nostalgia, pero de la buena. De la que hace recapitular mirando hacia días mejores. Desde la que brotan lágrimas de una lluvia ácida, de esa, la primera que según dicen, se lleva lo tóxico. Quizás hoy fue mi primera lluvia, la menos agradable, pero la más útil, la que al otro día nos entrega un día mucho más limpio que el anterior. Si, definitivamente lo mejor es estar conciente, de cada paso que doy, de cada suspiro que olvido. De la calma que me abraza y la incertidumbre que mi incita a seguir. Así, observando cada nuevo capítulo, dándome el tiempo de esperar, de respirar y de olvidar. Y volver a creer.

lunes, 6 de abril de 2009

Yo, el otoño y la nostalgia.

Me gusta esta foto, pero no ese gusto de ego, sino ese gusto de lo abstracto, de eso tonto que uno no puede concretar en palabras. Esa lectura inferencial que se puede hacer de una fotografía totalmente básica, pero que a mis ojos significa mucho y que toma un sabor distinto sobretodo si es secreto. Mi secreto...

domingo, 5 de abril de 2009

Un payaso más del show.

Yo quiero decir muchas cosas, las cuales no terminan su función hasta que son plasmadas, hiladas a través de torpes palabras. Quiero decir muchas, pero muchas cosas, las cuales a ojos convencionales pueden ser simples protestas de una jovencilla amargada. Y no, no es así, soy crítica, algo que carece en demasía en estos tiempos. Veo, escucho, presto atención, a cada detalle, a cada silencio ruidoso, a cada grito mudo... observo y escucho a cada instante y siento tantas ganas de hablar, de gritar. De romper cada silencio políticamente correcto. Es a tal punto, el cual se acelera mi corazón cada vez que me doy cuenta de diversas situaciones en las cuales realmente no puedo hacer nada, que estas palabras no sintetizan lo que realmente quiero decir. Quiero seguir luchando, seguir hilando sueños, seguir cumpliendo metas, seguir poniendo el corazón en cada cosa que hago, seguir con la sinceridad a pesar de todo, a pesar de esta sociedad de mierda en donde ser doble standar es el deporte favorito de muchos... y sé que se les viene a la mente los políticos, los corruptos, etc. Pero no, esta vez la corrupción viene de esos, de los silenciosos, de los que se te cruzan en la vida y te das cuenta que son payasos del show del cual se mofan. Mentira, una vil mentira es cada crítica que hacen a lo que ellos políticamente odian, pero en realidad es su inspiración para "vivir" ... para mentir (y seguir sonriendo).

sábado, 4 de abril de 2009

Un día tres de Abril....


A ellas, mis amigas... Muchas Gracias ...

Sobretodo, por enseñarme que todo es posible.

domingo, 29 de marzo de 2009

4:17 AM

El panorama se vuelve cada vez más acorde con la temporada. Frías hojas, quebradizas, que caen sin un mayor esfuerzo para conservar un segundo más de vida. Resignadas al destino de ser observadas sólo al momento de morir. Entregadas a nostálgicos recuerdos vanos, que sin querer tienen más vida que la propia historia. Que más pueden acotar mis ojos soñadores, testigos de un destino silenciosamente muerto. Silencio... como suelen ser las agonías.

martes, 24 de marzo de 2009

(...)

sábado, 21 de marzo de 2009

Prohibido olvidar.

Otra vez sentada frente a este frío papel, que no para de reprocharme mis constantes errores. Que si me siento mal, errada, complicada o en cualquier situación que motive a un análisis de más de un día, es netamente culpa mía. Lo sé, pero renuncio al papel de víctima, renuncio al papel secundario y renuncio a rol pasivo. Que si bien la historia la estoy escribiendo otra vez con la mano izquierda, nunca es tarde para tomar la historia por la derecha y escribirla cuantas veces quiera y de la forma más pulcra. Y si por enésima vez me tengo que perdonar lo haré sin retraimiento alguno, reconociendo el error como experiencia y no como martirio. Por que esta vez, el error es el pie de inicio a un nuevo capítulo, lejos de astillas y puntos suspensivos. Lejos de silencios ruidosos y caricias estratégicas. Me perdono y no te escucho, y no te miro, nunca más. No eres digno de una mirada sincera, ni de un abrazo veraz. Me escucho y vuelvo a empezar, de la mano de la experiencia, esta vez no la omitiré porque aprendí que quienes olvidan la experiencia están condenados a repetirla. Y si bien el error sigue ahí, esta vez será sin mí.



Es hora de cambiar...
TODO.

viernes, 20 de marzo de 2009

Run Run

Sacó papel y tinta,y un recuerdo quizás;
sin pena ni alegría,
sin gloria ni piedad,
sin rabia ni amargura,
sin hiel ni libertad...
(...)

jueves, 19 de marzo de 2009

(...)

De mandar todo lo más lejos posible. De detener el tiempo, de correr, de gritar. Correr descalza, sola, con el pelo al viento. Recostarme en el pasto, en el más lindo. Ganas de todo. De que la luna se apiadara de mis ojos cansados y me regalara la mejor estrella. De olvidar, de olvidarme. Ya se acabaron las ganas de soñar, las de creer y construir letras con un celofán, en mi arcoiris secreto. Ya no es secreto, todos lo saben, menos yo. Me olvidaron y los olvidé a todos. Así de simple, no me importan y no me importa si yo tampoco les importo. La redundancia me importa un carajo también. Y les puedo gritar, escupir a todos, y no me interesa hablar de sueños. Y puedo besarte y no darte mi corazón. Puedo hilar la historia cuantas veces quiera. Y más aún, dejar el capitulo a medias. Y odiar, y maldecir, y volver a escupir. Por que me sé la historia, escuché hasta los silencios, porque ESOS silencios, son los más ruidosos que puedan existir. Y te susurro lo poco que me importa. Lo poco que me duele y lo poco que recuerdo. Y pateo mil piedras, justo hoy, cuando todas se cruzaron en mi camino. Justo hoy, cuando mi seudo-rebeldía no sirve y mis mejillas vuelven a humedecerse, otra vez, antes la frustración de una actuación mal echa. Se humedecen, otra vez, delatándome frente a mi cruz.
Otra vez; no me resulta.

domingo, 15 de marzo de 2009

Podrías.

Por lo menos podrías venir, sentarte a tomar ese café, más amargo que de costumbre. Quizás comentarme un libro, una frase de alguna mala poesía que haya seducido a tus ojos, un tanto cansados. Mover una pieza, emitir imágenes, sonidos, movimiento. Crear. Podrías hacer presente tu espíritu seudo-revolucionario e hilar un nuevo capítulo. Acompañarme en esta noche nostálgica, amarga, como este café que no para de reflejar en su final, el comienzo de mi historia. Podrías ser partícipe de ella, podrías invitarme a participar de ella también. Podrías hacer tantas cosas que de cierta forma cambien el burdo panorama, en donde el café derramo su sinsabor en cada constelación de mi universo, reducido a una taza vacía, con las sobras de recuerdos rotos. Y tus ojos inquietos, incapaces de obviar lo paupérrimo. Incapaces de remecer la ilusión a la que alguna vez entregué mi decepción. La vida se transformó en la protagonista de mi historia, excluyéndome sin piedad alguna y resumiéndola a constantes puntos suspensivos, en los cuales un día me dormí.

jueves, 12 de marzo de 2009

Nada de nada.

Supongo que esto es algo similar a mi punto cero. Aquel, que no simboliza ni el comienzo, ni el final. Ni número positivo, ni negativo. Punto al cual se llega, cuando tus emociones por medio de un consenso, dan cuenta de la nada en la que estás. Si, nada, así de simple; todo y nada a la vez... ¿Demasiado amplio? Por supuesto, pero qué puedo hacer cuando estoy parada justo en este enorme escenario. Ese, en el que te sientes sola, y lo peor, es que sabes que realmente lo estás.

jueves, 5 de marzo de 2009

Una porquería.

Fuí víctima del típico lobo disfrazado de oveja. Si, tal y como lo relato. Evitemos aludir a referentes masculinos, ya que esta vez, el lobo fue la maldita televisión. Aquella maquinita venenosa, el opio del pueblo como dicen por ahí. Yo, en mi tarde de ocio (que últimamente, escasea) mientras hacía zapping apareció frente a mis ojos la cancioncita pegajosa del preuniversitario Pedro de Valdivia. Y con un banal sonrisita le digo a mi estimada colega : "Huy, que chori la canción". En ese instante hubo un quiebre, cuando recibí de respuesta que esa cancion que tan monona me parecía, para mi amiga, era una burla a los estudiantes de carreras como pedagogía, ya que perpetuan la tradición de que ciertas carreras tienen mucho más prestigio que otra. Más explícita no pudo haber sido. Eso era, por eso la cancioncita, los niños felices de entrar a universidades estatales a estudiar carreras como medicina, ingenería y derecho. Perfecto, la fórmula exacta para introducirnos el chip para seguir menospreciando a carreras tan mal vistas como lo estan siendo los profesores. Porque me lo dijieron, desde que decidí ser parte del cuerpo pedagógico de nuestro querido país: ¿Y profe? ¿Y el sueldo? ¿Y el stress? Etc, Etc Etc. Claro, y ahí viene el gran comercial del Pedro de Valdivia, que no vende un año de preparación a la P.S.U, sino que nos vende el set de felicidad, en donde ellos saben lo que quieres, entrar a estudiar esas carreras que aseguran tu exito ecónomico, aludiendo incluso, al éxito amoroso (como lo expone explícitamente en el comercial) para seguir mirando en menos carreras tan hermosas como la pedagogía*, que día tras día se ve menospreciada por este monopolio de prestigio, escondido a través de cancioncitas de baratas y signos pesos por doquier,
*Carrera que puede modificarse a gusto del lector.

lunes, 2 de marzo de 2009

Casi-Casi.

Un amigo hace casi un año, cuando estabamos en un lugar muy bonito y hacía mucho frío me dijo (en medio de mi tarde deprimida al máximo) : Ah Cecy, espera no más, en un año más te estarás riendo de esto. Y en mi cara de espanto sólo había deseperación, al sólo pensar que 365 días no eran suficientes para sanar el dolor que entonces padecía. Bueno. Falta un poco para que se cumpla el año y la nostalgia empapa cada rincón. A tal punto, que tuve que escribir en mi querido blog. Se cumplirá un año ya, desde ese entonces, en el cual se rompió algo más que una ilusión. Pero esta vez el recuerdo no es para culpar, reprochar o hacer sentir mal. Esta vez el recuerdo es para olvidar, para decir adiós, para sanar, para sentirse realmente aliviado. Para perdonar, pero sobre todas las cosas, para perdonarse. Para no dar más pasos en falso ni provocar acciones en base a resentimientos. Simplemente, para partir y dejar partir. Para cerrar los ojos y comenzar de nuevo. Simplemente... estar bién.

viernes, 27 de febrero de 2009

¿Por qué?

Cerré los ojos, miré a las personas más de la cuenta (si, personas, no gente, ese término es demasiado generalizado) Quise saber específicamente que pasaba por la mente de esa señora que lloraba a las 10 Am (muy temprano para llorar) O el joven de mi edad, en el mall, junto a un celular, no paraba de llorar. Quise saber que pasaba entre los hombres que se miraban de forma cómplice en un café muy cool. Y en una de esas, saber porqué las mujeres del otro café más cool aún se veían tan felices. Quise saber tantas cosas, como todos los días, pero hoy fue mças, mucho más. La sed de entender la actitud de cada persona que llamaba mi atención, fue mucho más lejos de lo habitual. Quizás por eso, un niño en la micro, con cierta deficiencia mental, quiso saber porqué yo quería saberlo todo y sin respeto alguno, me llamó tía y me dio un abrazo gigantesco, como si su labor en el mundo fuese ir desbordando amor sin pedir nada a cambio. Sin darme cuenta iba abrazada de aquel niño, y sabía su nombre y su edad, mientras él, a cambio de mi curiosidad, me llenaba de besos. Besos tan llenos de magia, que mi mejilla escrupulosa olvidó que el exceso de saliva era uno de sus enemigos número uno. Hasta que mientras hablaba con él, de mi boca nació un extraño “mi amor”. Si, tal y cual como lo relato. Yo, un ser humano complicado en los cuales los niños, no son su fuerte, y por nada del mundo diría esas palabras llenas de dulzura, estaba diciendo una de aquellas, de las cuales tanto se mofa. En ese instante todas las preguntas del día se redujeron a un instante de olvido, sin preguntas, sólo con los besos de este ser, que me regaló un instante tan mágico, con abrazos por doquier. Cómo si supiera que no soy de piel y quisiera fastidiarme. Pero no, logró que me emocionara, que me sintiera algo ñoña y que al final del viaje, mis ganas de quedarme ahí con él, fueran más grandes que mi set de preguntas cotidianas. Un momento extraño, pero mágico. Si, aquel niño era mágico. Aún me preguntó como lo hizo, para adornar un día tan nostálgico, en el que él, con una sonrisa ingenua, me hizo olvidar todas las respuestas de las que venía huyendo.

miércoles, 25 de febrero de 2009

Pseudo-nombre.

Pseudo-intento. Atrofiado, cojo y desvalido. Él me hablaba de sexo, ella de amor. ¿Que podría hablar yo en este capítulo mal echo? Sentí el instinto en el estómago. El maldito instinto se posicionó en un lugar estratégico, como si tercamente no se fuese a ir, sin antes, conseguir el objetivo : que yo atendiera a su llamado. No, no y no. Nuevas versiones para algo que obligatoriamente intenta posicionarse, como si fuera su lugar desde siempre. Como si esta historia fuera suya. Quizás, para que sea mía, tiene que acabar. No entiendo y no sé si quiero entender. Me siento *. y *. Realmente jodida. Quizás yo me lo he buscado. O esto me buscó. Tengo ganas de *. Quizás sólo tengo que llamar a cada cosa por su nombre y situar todo en su lugar. Bueno; Partiré reconociendo lo * que me siento. Fin.
-
-
-
*Mensaje no codificado.

lunes, 23 de febrero de 2009

Quizás.

Eran cerca de las 11 P.M. Quizás las 12 y en una de esas, tal vez la 1 A.M. En esos instantes lo que menos importaba era el tiempo, el cual, sin respeto alguno posaba en cada hombro, de quienes adoptaron la calle como su hogar. Llegamos el grupo de personas, todos con alguna expectativa, ya que no todos los días se suele ir en la noche, afuera del hospital San Juan de Dios a repartir alimento a quienes allí, nada esperan. Quizás, una voz que les recuerde que sigue viviendo, o un té, que los lleve a lugares de antaño, donde solían estar mejor. Calle- Cecilia, Cecilia - calle. Una fría presentación frente al panorama que mis ojos decodificababn entre mis manos tiritando (a causa de mi nersiosismo) y mi boca apretada por no saber que decir. Podría enumerar una a una, todas las situaciones que hicieron que mi estómago se volviera el máximo exponente de mi sorprendimiento. Una níña pequeña en la calle, un abuelo, un par de historias sin contar y otras que simplemente quieren pasar al olvido. Y la peor historia, el presente, que desde el minuto en el cuál se hace notar, se desvanece frente al interfecto panorama. Como siempre, el rubro de lo teólogico ha sido más que un simple tema para mí. Pero no la existencia misma de un ser superior, sino, qué nos lleva a creer a en la existencia de un Dios, qué nos lleva a encarnar la fé y así o qué nos lleva a renegar la supuesta existencia. A modo de introducción, podría acotar que estoy en ése proceso de vida, en el cuál estoy analizando minuciosamente mi tendencia teológica, que de lógica, no tiene nada. Con el pasar de los minutos, veía como mis compañeros (y amigos) cantaban canciones eclesiásticas para ver el fúnebre pasar de los minutos, en una fría noche de verano. Y mientras mis oídos analizaban la letras de las canciones y mi mente volvía a llenarse de preguntas, me dirigo a una señora, dueña de casa standar y le pregunto el rol de Dios, en todas las personas que viven en la calle. Ella me empieza a comentar que es muy fuerte la presencia de Dios en todas las personas (incluyendo ella). Incluso, nos detallaba la vida de varios de ellos, que sabían de memoria salmos de la Biblia. No pude decir nada más, mis labios se apretaron más de lo acostumbrado y esas ganas de llorar que me dan ada vez que la situación me supera, se hicieron más presentes que nunca. Comprendí hasta qué punto, la brecha es gigantesca. Que si bién, es un privilegio para nosotros tener comida, abrigo y alguien que nos espera. El nivel llega hasta el punto, que cuestionarse la existencia de Dios llega a ser un privilegio. Nosotros tenemos el tiempo para llenarnos de preguntas, en las cuales, si sentimos que nuestra creencia en Dios no es válida, no se nos desmorará la vida. ¿Pero que pasa con las personas que viven en la calle, en donde su único consuelo es la encarnación de su fé, es la única compañía frente a las solitarias noches, en donde están totalmente a la deriva? En donde la creencia en algo fundamental, el cuál literalmente es su único alimento. Y mientras mi mente estaba en su máximo esplendor, recordé la frase que dijo mi querida colega el día anterior : Si el miedo se hiciera carne, le llamaríamos Dios. Entonces, el silencio se quedó con la última palabra.

viernes, 20 de febrero de 2009

Balada de mal genio.

Hay días en que siento una desgana
de mí, de ti, de todo lo que insiste en creerse
y me hallo solidariamente cretino
apto para que en mí vacilen los rencores
y nada me parezca un aceptable augurio.

Días en que abro el diario con el corazón en la boca
como si aguardara de veras que mi nombre
fuera a aparecer en los avisos fúnebres
seguido de la nómina de parientes y amigos
y de todo indócil personal a mis órdenes.

Hay días que ni siquiera son oscuros
días en que pierdo el rastro de mi pena
y resuelvo las palabras cruzadas
con una rabia hecha para otra ocasión
digamos, por ejemplo, para noches de insomnio.

Días en que uno sabe que hace mucho era bueno
bah tal vez no hace tanto que salía la luna
limpia como después de jabón perfumado
y aquello si era auténtica melancolía
y no este malsano, dulce aburrimiento.

Bueno, esta balada sólo es para avisarte
que en esos pocos días no me tomes en cuenta


Mario Benedetti.
Somos los muertos,
los que observamos a los años vivir.

miércoles, 18 de febrero de 2009

5 A.M

Ella solía sentarse en el balcón, para encontrar toda las noches la estrella más alejada de sus semejantes. Daba igual si brillaba, sólo quería una de aquellas lejos de las demás. De cierta forma todo terminaba en una especie de trastorno al verse reflejada en el cielo, de la misma forma, con un leve brillo, pero sin nadie con quién compartirlo. Quizás por que tenía el don de repeler a todo quién mirara sus ojos directamente por más de 4 segundos o simplemente por el constante miedo de extender la mano y cerrar los ojos. Las noches concluían siempre igual, el cigarro de las tres de la mañana, un café cargado que jamás pordía terminar, ya que en su afán de sentirse ruda (al cargar demasiado el café), su estomago terminaba provocando una batalla campal. Todas las noches como siempre, con el loco afán de saber cual era la pieza que fallaba, cuál era ese algo que hacía que cada noche, la soledad cargara sus hombros más de la cuenta. Ése espejo trizado, esa lágrima muerta, ese paso mal dado. Y la noche, las astillas, el dolor. Ya era hora. La de abandonar, la hora sigue corriendo y tú no sigues apartando la mirada de aquel lugar, buscando el inutil reflejo de algo que quieres ser, sólo en respuesta al miedo de caer, nuevamente, una vez más, como siempre. De caer tan hondo, que sólo logras verte, alzando los ojos cada noche, imaginando el reflejo de quién ya no está. Imaginando que nadie nota lo sola que estás. Simplemente, es hora de embarcar.

sábado, 7 de febrero de 2009

¿Que nos diremos hoy frente al muerto pasar de nuestros días? ¿Tendré que saborear el asco de un olvido forzado? Y las paredes están en blanco, mi boca sin palabras, y mis ojos, con más lágrimas de la cuenta. No debió ser así, y cuando crees en las ganas de cambiar las cosas, te das cuenta que una puñalada al lado izquierdo de tu pecho es la respuesta perfecta para hundirte y destrozar todo. Destrozar (te). Destrozar (me) Destrozar (nos). Podría gritar, llorar, preguntar mil veces porqué y buscar respuesta en este vacío, que está lleno de astillas. Pero me toca asumir, creer en lo único que queda... la realidad. La misma que disolvió todos los recuerdos, la misma que desde hoy, alojó su peso en nuestras vidas y terminó diciéndonos lo que cada cual tenía que hacer. La que nos informó la hora, el lugar y la forma de decir el maldito adiós.

martes, 27 de enero de 2009

Crónica de un cigarro intacto.


Siempre pensé cual sería el cigarro más placentero. Bueno, aludiremos al foro de la obviedad, y si planteamos esta preguntas, será generalizada la respuesta de que el mejor, es el después de comer o después de concretar el acto amoroso (o como le quieran llamar, estimados). Desde que me inicié en el vicio, he tenido el gusto de acompañar agradables instancias con un cigarro, en los cuales, éste, ha resultado ser más que placentero. Pero no había tenido la oportunidad, de que sólo la recepción de un cigarro, llegara a un nivel tan alto, que ni ganas quedan de fumarlo, sólo por consevar su cuerpo intacto para perpetuar su recuerdo. Y resultó que aquel día llegó y tuve la oportunidad de tener en mis manos, el cigarro, que sin haberlo fumado, resultó ser el que me ha causa mayor placer y emoción. Partiré mencionando, a modo de introducción, que participo en un grupo de acción social, el cual realiza variadas actividades, y entre ellas, realizamos una escuela de verano para los niños en riesgo social, a ellos, quienes la suerte olvidó tenderles una mano. El trabajo con estos niños, acabó ayer y mientras el furgón emprendía el viaje de regreso a nuestras casas, unos niños nos pidieron un recuerdo de nuestra parte. Muchos entregaron variadas cosas, anillos, encendedores, etc. Y yo, en mi confunsa desición de regalar algo significativo, le regalé a una niña una cajetilla de cigarros vacía (con previa advertencia, que no porque la tía fume, ella debía hacer lo mismo). Ésta, era de mis favoritos, unos cigarrilos mentolados que hace mucho tiempo no tenía el placer de fumarlos, se la entregué vacía, mencionando el placer que me causaba tener uno de éstos en mi boca y que ojalá algún día, si me quería regalar algo, fuese una cajetilla como ésta (obviamente, era un broma). El furgón ya partía, y era la hora en donde los niños, sin que supieramos con anticipación, nos regalaron sus cosas para hacer concreto el recuerdo que cada uno atesoraba. Variados obsequios llegaban a las manos de nosotros, "los tíos". Llaveros de los niños, relojes, peluches, etc. Cuando la niña a la que le dí mi cajetilla, me dice "Tía, su regalo"... y en mis manos estaba esa cajetilla, mi favorita... y nueva. Llena de esos cigarrillos que tanto me gustan. Me gustaría omitir que algunas rebeldes lágrimas se hicieron presente al momento de recibir el regalo, pero la alegría fue mucho más grande, que la leve verguenza que me dió derramarlas en frente de algunas personas (lo cual siempre intentó evitar). El repertorio de palabras se me acabó en ese instante. Cuando hice enfasis a la satisfacción que sentía de fumar, fue una simple broma, jamás pensé que ella recepcionaría aquella frase, para cumplirla y hacerme sentir importante. Porque así me sentí, importante, para alguien que no me conoce, pero que reconoce nuestro trabajo, dentro de su mundo, que de crudeza, tiene demasiado, pero aún conserva ese ángel, esos ojos llenos de alegría, sin importar la imagen de fondo. Me costó mucho abrir la cajetilla ya que mis ganas de conservarla intacta, abundaban. Pero aquí estoy, con el humo de éste impregnado en mis dedos y con estas palabras impregnadas de emoción.


Sonando... El cigarrito - Victor Jara

sábado, 10 de enero de 2009

Mal día.

No, no me venga con esas cosas señora, está bien; mis senos son pequeños y mi cabello es corto, pero no porque la moda en hoy en día sean las chiquillas de grandes senos y una cabeza adornada de extensiones, ¡usted va a creer que yo soy hombre!

viernes, 9 de enero de 2009

Sin su qué.


-- Esa chica del vaso de agua…
-- Sí?
-- Creo que está distraída pq está pensando en alguien.
-- Te refieres a alguien del cuadro?
-- No, quizá un chico con el que ella se cruzó y le dio la sensación de que los dos se parecían.
-- Ah, o será que ella prefiere imaginarse una relación con alguien ausente que tener una con los que están a su lado.
-- No sé, quizá sea lo contrario y ella se desvive por arreglar la vida de los demás.
-- Y de ella? De todos los desarreglos de su vida, quién se ocupará?
-- En mi opinión es mejor dedicarse a los demás que a un gnomo de jardín



Amelie, es la mejor película, sería feliz viéndola todos los días; pero aún no me vuelvo tan loca (como para hacer eso). Chao - Chao.

martes, 6 de enero de 2009

Es frustrante,
cuando el estante de palabras
sólo se reduce a dos :
"Una - mierda".

sábado, 3 de enero de 2009

Buenas Noches.


Y a veces me canso. De luchar contra la corriente, de creer en supuestas utopías, me canso a ver mi triste realidad, de llorar al ver que ésta es una estupidez al lado de la realidad del niño que me pregunta sorprendido si es que tengo papá. Me cansó del día, de abrir los ojos, de ver esta nefasta realidad, en la que te ves inmerso y a veces no puedes luchar. Quizás es sólo un mal día me puedes decir, pero no es un día, no es una hora, ni un tiempo, es una realidad, la misma que vemos todos y que sólo algunos logran enfrentar. Porque te cansas de protestar, de gritar en un mundo sordo, de ver en un mundo ciego. Y si mis sentidos son los alterados, bastantes problemas me traen en un mundo donde se impone lo que es normal, lo que es justo, lo moral. Donde la conveniencia prima ante todo. Y si las cosas son así, a veces entiendo a todos aquellos que murieron en el intento de cambiar la realidad, porque si no supiera que tengo sólo una vida para alcanzar mis metas según mis convicciones tal vez me hubiese rendido hace mucho. Si supiera que mi destino ya está echo no fomentaría una idea tan banal para algunos. Si no supiera mi rol en esta sociedad, no albergaría sueños tan profundos. Por que hoy me cansé, porque en la batalla de hoy me ganaron, por hoy me rendí, un instante, un espacio, un segundo que se quiebra entre mis lágrimas, entre la impotencia, pero pierdo dignamente. Pero hoy, sólo por hoy le doy ventaja a aquello que me duele, que me agota, que me llena de impotencia. La injusticia, el abuso, la ignorancia. Pero la lucha continúa, claro que después de una taza de café y un cigarro (a mi hora favorita). Después de darme cuenta que es hora de dormir y que mañana será otro día. Buenas Noches.


PD: Intente olvidar que la injustica social se soluciona con actos de caridad, de buena fé y fundaciones de ayuda para ayudar a los más vulnerables, no, eso es basura temporal. Amplie su mente y elimina la burda idea anterior y recurra al concepto de EDUCACIÓN! De no ser así, lo invitaré a presionar la equis que se posa en la esquina superior derecha!!

Cae, cae.

lunes, 29 de diciembre de 2008

Patéticas reflexiones de un exceso de existencialismo.


Ya, me despido de mi querido blog por este año. Nos veremos el próximo. Y como me suele pasar en estas fechas, la nostalgia abunda más de la cuenta. Gracias querido blog por acoger siempre, de tan buena voluntad, estas letras cargadas de emociones, que siempre en su afán de disfrazarse, nunca logran el objetivo y terminan por delatarse. Podría escribir extensamente sobre las reflexiones de este año, pero la hiperventilación nunca ha sido buena amiga, por lo menos, no de mujeres sencibles como yo. Ya; fue un año fuerte, aprendí a ser autosuficiente y todas las palabras que empiecen con el prefijo auto y que se refieran a que aprendí a no ser dependiente. Aunque, aprendí más cosas, muchas más, pero en fin. También conocí personas muy lindas en la universidad, me superé academicamente y aprendí que no todo puede ser como yo quiero. Aprendí que soy la naftalina con más celofanes del mundo y que mi pelo no merece ser el responsable de mis desequilibrios emocionales. Y estoy descubriendo mi identidad política. Ya, gracias a las personas que me apoyaron en el momento más feo del año. Y Tengo la mamá más linda del mundo. Y Tú, el chasconcito de ojos dormilones; Gracias por integrar a mi vida tus notas musicales, me encanta escucharte cantar y tocar la guitarra. Algún día, cuando tenga mucho dinero, te voy a regalar la guitarra más linda del mundo. Mmm, bueno, puedo explayarme aún más y decir que hice muchas cosas relacionadas con mi vocación (literaria, social y educacional) y conocí muchas personas (lindas y no tanto). Gracias Mane, por todo (no acotaré nada más). Y a tí, te voy a mencionar en esta parte del texto y diré que apestas y que si yo fuera hombre y fortachón, te iría a reventar esa cara de gusano asqueroso. Que más puedo escribir...bueno ya, si sé, soy idiota, mañosa, mal genio,extraña, y ñoña. Ah, fundida y pesada. Ya, como dice la canción de la Fran Valenzuela : "Recuérdame, como la de mal genio, recuérdame, como la bruja amargada que chillaba y no coqueteaba cuando se necesitaba". Ya, esa sería mi reflexión de fin de año. Que les vaya bién, ojala sus resultados sean proporcionales a sus intenciones y esfuerzos. Y espero seguir este año trabajando en las cosas que me apasionan, tal como lo hice este año que se disuelve en mis recuerdos (huy, que poético). Y diré la frase mágica : Feliz año 2009. Chao, Chao lectores.

(Pondré mi nombre al final, para que se vea más top)

Ceci.

miércoles, 24 de diciembre de 2008

Buenas Noches.

Y a veces me canso. De luchar contra la corriente, de creer en supuestas utopías, me canso a ver mi triste realidad, y llorar al ver que ella es una estupidez al lado de la realidad del niño que me pregunta sorprendido si es que tengo papá. Me cansó del día, de abrir los ojos, de ver esta mierda de realidad en la que te ves inmerso y a veces no puedes luchar. Quizás es sólo un mal día me puedes decir, pero no es un día, no es una hora ni un tiempo, es una realidad, la misma que vemos todos y que sólo algunos logran enfrentar. Porque te cansas de protestar, de gritar en un mundo sordo, de ver en un mundo ciego. Y si mis sentidos son los alterados, bastantes problemas me traen en un mundo donde se impone lo que es normal, lo que es justo, lo moral. Y si las cosas son así, a veces entiendo a todos aquellos que murieron en el intento de cambiar la realidad, porque si no supiera que tengo sólo una vida para alcanzar mis metas según mis convicciones tal vez me hubiese rendido hace mucho. Si supiera que mi destino ya está echo no fomentaría una idea tan banal para algunos. Si no supiera mi rol en esta sociedad, no albergaría sueños tan profundos. Por que hoy me cansé, porque en la batalla de hoy me ganaron, por hoy me rendí, un instante, un espacio, un segundo que se quiebra entre mis lágrimas, entre la impotencia, pero pierdo dignamente. Pero hoy, sólo por hoy le doy ventaja a aquello que me duele, que me agota, que me llena de impotencia. La injusticia, el abuso, la ignorancia. Pero la lucha continúa, claro que después de una taza de café y un cigarro (a mi hora favorita). Después de darme cuenta que es hora de dormir y que mañana será otro día. Buenas Noches.

Compañero Jesús ¿presente?

Creo en Jesús todo astuto, creador de la sabiduría y la valentía... Hay Jesús, compadre, no entiendo porque en su calidad de humano lo tildan de profeta. Pobre Jesús, que en su calidad de héroe divino no tiene derecho a defenderse de las garras de una iglesia farandulera que le sube el estatus. Seguramente si estuvieras entre nosotros SQP hubiese investigado tu calidad terrenal y tu actividad sexual con miles de Marías Magdalenas. Oh Jesús, el profeta de la farándula, creo que te admiro, no lo creo, lo siento, eres una figura digna de admiración, llevan más de 2000 años cuestionando tu existencia y ahí sigues, inmóvil, quizás riéndote de nuestra estupidez, porque no cuestionaremos a tu padre, un tal señor (de la casi querencia) que no ha hecho presencia en esta tierra, pero tú, mi Jesús, estuviste entre nosotros, con nosotros, hay registros de ellos (dicen), y mientras todos especulan tu verdadera razón de ser, te mantienes firme. Te cuestionan el física (ya que dudosamente tienes pinta de modelo neo-hippie estadounidense y no de un simple profeta con rasgos de su territorio natal) Tus amoríos con quizás cuantas chiquillas locas, tu capacidad de milagro, etc., etc. Farandulizan tu existencia, tu actuar, tu ser una y mil veces y tu sigues, ahí, sin defenderte. ¿Por qué? Porque nos dejas con esta duda compañero, porqué no vienes y nos aclaras esta incertidumbre… ¿Sabes porque? Porque tu sabiduría trasciende, va más allá. Porque fuiste valiente, tu deceso fue valientemente en una cruz, moriste por tus ideales, te tacharon de loco y seguiste ahí, fuerte. Quizás no eras santo, quizás si te masturbabas, desnudabas a magdalena con la mirada, quizás no multiplicaste el vino, ni hiciste ver a ciego y tal vez toda esa manga de idealizadores que escribieron en la tan conocida revista de farándula “Biblia” olvidaron que existía la objetividad. Ellos que no vieron más allá. Creo en ti Jesús, pero en ti como compañero, como un loco que lucho por lo que creyó, quizás cuantos Jesús más han muerto en la cruz de sus ideales, han sido tachados de locos y lamentablemente su padre no era un Dios que capaz de hacer justicia. Cuantos, cuantos Jesús andarán deambulando. Me saco el sombrero ante ti, querido Jesús por la valentía de soportar cuanto pelambre en torno a tu honrada persona, creer en lo ideales, ser humano frente a un montón de pelafustanes ignorantes que prefirieron atribuir tus grandes características a un loco o a un Dios, liberándose así de la culpa de saber que ellos también podrían serlo, pero es mas fácil ser un cerdo hipócrita, un cristiano miserable, un ser humano simplemente. Me pongo de pie frente a ti, y a todos los Jesús que han pasado por esta tierra, a todos los que han muerto por lo que creyeron, sintieron, creo en ti Jesús, pero lejos de tu calidad de ser divino, creo en ti como hombre revolucionario, no me importan tus milagros, no me importa tu religión, ni tu tendencia política (bueno, en realidad si). Me importa que hayas pasado por esta tierra, que seas tan querido, tan odiado, tan burlado por aquellos niñitos ateos que juegan a ser rebeldes, tan idolatrado frente a esos cerdos creyentes que flagelan al pueblo. Me importa que a pesar de todo, sigas siendo uno de los mayores misterios y que tú, con tu leve sonrisa irónica plasmada en cada imagen, nos hagas un guiño a quienes creemos en ti y en tu amor por el vino. Salud Compañero.